Existirá un próximo encuentro, el día y la hora  aún están imprevistos, después de todo existen múltiples lugares en los cuales nos podemos encontrar, una conferencia, algún taller, la calle o alguna coincidencia. Cuando aquello pase me sentiré un tanto extraño y sin saber que hacer, pero a medida que de más pasos y me vaya acercando, más calmado podré saludarte. Espero que podamos conversar, que tengamos tiempo, que tú tengas tiempo, que yo tenga tiempo. Nos diremos que nos ha pasado y como nos ha ido, espero que seamos sinceros, que contemos  un suceso alegre o tal vez muy triste y que salgamos del protocolo aquel de decir que todo está siempre tan bien.

Nuestro próximo encuentro se dará por el solo hecho de ser necesario, porque los dos lo queremos, porque no pudimos dejar de pensar en el otro, porque ya entendí mejor las cosas y puedo hablarte, porque después de todo nunca me arrepentiré de haber reiniciado nuevamente la comunicación contigo, de poder hablarte por el chat del hotmail, de encontrarte por allí y de improviso.

Busco que nuestro próximo encuentro sea ameno, se que disfrutaré de todas las anécdotas que desees contarme, ya aprendía escuchar, y saborear lo que tiene cada anécdota de curioso y cotidiano.

Quisiera para aquel encuentro decirte que para variar y como siempre aun te quiero, pero ya no sufro tanto, que entendí las cosas, que por fin puedo ser el amigo aquel que quisiste que sea. Tal vez sea tarde, pero no importa.